La economía mexicana está atravesando por una fase de desaceleración afectada por su industria ligada a Estados Unidos y el contagio podría ampliarse hasta su enorme sector servicios, de acuerdo con algunos indicadores. El índice manufacturero del privado Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) se redujo un 3,1% en julio contra el mes previo, para ubicarse en los 50,4 puntos, muy cerca de la zona de contracción. Según el IMEF, la permanencia del índice debajo de los 50 puntos sugiere que la actividad económica no está creciendo. La actividad económica en México ha comenzado a desacelerarse siguiendo la tendencia de Estados Unidos. De prolongarse la pérdida de dinamismo en ese país, es muy probable que la actividad no manufacturera se desacelere también.
El premier italiano anunció el nuevo plan de "austeridad" aprobado por su gobierno que fue muy bien recibido por el presidente del Banco Central Europeo (BCE), y la canciller alemana. Las medidas italianas adelantan que en un año habrá recortes por 45 mil millones de euros en base a privatizaciones y a una ampliación de la edad jubilatoria.
Los ministros de Economía y banqueros centrales del bloque UNASUR constituyeron el Consejo Suramericano de Economía y Finanzas. En una reunión celebrada en Buenos Aires los países del bloque superaron sus diferencias en política económica y acordaron un conjunto de medidas. Unasur decidió impulsar un fondo latinoamericano de reservas, apuntalar el uso de monedas de la región para desdolarizar el intercambio entre los miembros, incentivar el comercio intrarregional, fortalecer la Corporación Andina de Fomento (CAF), una suerte de banca de desarrollo latinoamericana, y acelerar el lanzamiento del Banco del Sur. Las distintas herramientas serán analizadas durante sesenta días para llegar con propuestas concretas a la próxima cumbre de presidentes en Paraguay a fines de octubre . El objetivo de esas iniciativas es reducir la vulnerabilidad externa de la región y dinamizar los procesos de desarrollo en medio de una crisis que se profundiza.
La economía francesa desaceleró su crecimiento hasta estancarse en el segundo trimestre del año, frente a los tres primeros meses de 2011, informaba la oficina de estadísticas de ese país. No obstante, en el segundo trimestre del año la economía creció 1,6% respecto al mismo período del año anterior. Se esperaba un crecimiento del 2% interanual y del 0,2% frente al primer trimestre. En el primer trimestre del año, la economía francesa había crecido 0,9% frente al trimestre anterior y 2,1% en términos interanuales. En la cartera de Finanzas reconocieron que los datos son inesperados y preocupantes, pero remarcaron que el gobierno aún espera que la economía crezca 2% en 2011.
Sin embargo, el estancamiento en el segundo trimestre supone que Francia tendrá que aumentar sus esfuerzos en la reducción de la deuda. El objetivo actual es reducir el déficit presupuestario, ahora de 7% del PBI, a 5,7% este año y por debajo del 3% antes de 2013. Pero la desaceleración económica reducirá también los ingresos fiscales, haciendo más difícil la baja del déficit. Durante la semana Francia fue objeto de ataques especulativos en los mercados internacionales, los cuales corrieron la mira de Italia y España y enfocaron sobre París. Sin embargo, la política del Banco Central Europeo de comprar bonos en el mercado secundario llevó tranquilidad al escenario de la eurozona.
La economía mundial está entrando en "una nueva y más peligrosa" fase debido a la crisis de deuda en Europa, advirtió el presidente del Banco Mundial. Considera que las preocupaciones por la deuda europea son mucho más graves que las que hicieron rebajar la calificación de la deuda estadounidense. "Estamos en los primeros momentos de una tormenta nueva y diferente, no es la misma que en 2008", advirtió. "En los últimos años el mundo se ha movido de una recuperación problemática a múltiples velocidades -con los mercados emergentes y algunas economías como Australia creciendo y los mercados en desarrollo luchando- a una fase nueva y más peligrosa". Las tasas de interés están en bajos históricos en el mundo desarrollado, lo que significa que a los bancos centrales no les queda margen de actuación en sus políticas monetarias.
Además, los gobiernos se endeudaron para financiar medidas de estímulo económico y tendrán que pedir prestado para financiar más. "La mayoría de los países desarrollados agotaron su espacio fiscal y su política monetaria es tan flexible como podía ser". Agregó que la acción de la Unión Europea no tuvo el efecto deseado. "La lección de 2008 es que cuanto más tarde se actúe más hay que hacer".
No hay comentarios:
Publicar un comentario