viernes, 14 de mayo de 2010

Planes, propuestas y sus efectos

El tema expuesto en el anterior blog ha suscitado una serie de opiniones, por parte de economistas y expertos en situaciones internacionales.

Comentemos algunos de esos criterios: de acuerdo a opiniones fundadas, el principal problema reside en las crisis fiscales. Para otros, la dificultad estriba en las políticas cambiarias. En ciertos casos se menciona como idea abandonar el euro por parte de países como Alemania. En este último aspecto se razona que si Alemania - con su propia moneda - ésta podría apreciarse reflejando su gran superávit en cuenta corriente. En cambio con el euro declinando notoriamente, su economía se tornaría aún más competitiva. Hay quienes piensan que el euro en los primeros meses de 2011 tendrá el valor de l dólar. Es decir, euro y dólar valdrán lo mismo. Por lo tanto, el euro deberá seguir descendiendo y acercándose a la paridad con el billete americano.

Agreguemos que la inquietud mundial ha llevado al presidente de los EE.UU a solicitar a España que emprenda acciones decisivas como parte del esfuerzo europeo para fortalecer su economía y construir confianza en el mercado. También habló con la canciller alemana y con el presidente francés a raíz de las turbulencias en la zona euro.

Será muy difícil que algunos países periféricos de Europa se libren de enormes default en sus deudas externas publicas o privadas (o ambas). La austeridad fiscal necesaria es de tal magnitud que la economía se contraerá significativamente. La única manera de evitar eso es logrando un saldo exportador. Y la manera de conseguirlo según las técnicas generalizadas, es devaluando.

El presidente del Gobierno español, reclamó un "esfuerzo nacional y colectivo" ante la crisis tras presentar un plan para reducir el déficit, que incluye la rebaja del 5% de los salarios de los empleados públicos y el congelamiento de las pensiones. Se trata de recortes adicionales encaminados a acelerar la reducción del déficit público y situarlo en el 3% del PBI en 2013, lo que supondrá reducir en 15.000 millones de euros el gasto en 2010 y 2011. Para alcanzar ese objetivo, el Ejecutivo rebajará los sueldos de los empleados públicos este año y los congelará el próximo, así como los del Gobierno, en un 15%. La rebaja de un 5% en el salario de los empleados públicos es la primera aprobada por un Gobierno en España, que sin embargo ha visto su sueldo congelado en dos ocasiones en los últimos 20 años. El presidente español avaló un recorte del sueldo de los diputados y senadores, un asunto que plantearon otras formaciones políticas. También suspenderá en 2011 la revalorización de las pensiones, excepto las no contributivas y las mínimas, lo que significa que no se actualizarán el próximo año de acuerdo con la inflación. La congelación de pensiones para el próximo ejercicio pone fin a 25 años de subas garantizadas por ley. El Gobierno suprimirá además a partir de 2011 el denominado cheque-bebé, la prestación de 2.500 euros por nacimiento o adopción de un hijo. Dicha prestación fue una de las medidas estrella de la política social del Gobierno socialista, anunciada en julio de 2007.

La Comisión Europea (CE) presentó un plan para prevenir futuras crisis, que incluye un endurecimiento de las sanciones a los países con déficit públicos reincidentes y el envío de los presupuestos nacionales a Bruselas, para que sean evaluados antes de su aprobación en los respectivos parlamentos. Las iniciativas, que también buscan acortar las divergencias de competitividad entre los socios y poner en marcha un mecanismo de resolución de crisis más allá de los aprobados recientemente para rescatar a Grecia y blindar el euro, han cobrado relevancia a la luz de los últimos acontecimientos, que dejaron al descubierto la necesidad de reforzar el pilar económico de la unión monetaria.

Por parte de Portugal - y a los fines de defender a a ese país y a su moneda única -, el primer ministro, señaló al término del Consejo de Ministros que se aprobó el paquete de austeridad con el objetivo de reducir este año el déficit fiscal, ahora en el 9,4%, en un punto más de lo previsto, hasta el 7,3 %. En 2011, cuando las medidas de ahorro entren en vigor todo el año y no sólo seis meses como en 2010. Portugal espera descender en dos puntos el déficit fiscal previsto y situarlo en el 4,6.

La reducción del déficit presupuestario británico desde un récord del 11% de la producción nacional será la primera prueba a considerar y definir. Los ministros del nuevo gobierno se reunieron en el primer encuentro del gabinete y como primera medida decidieron reducir sus salarios. Esto rebajará el salario del primer ministro a 142.500 libras al año (u$s 210.500) desde las 150.000 libras, mientras que los ingresos de los ministros disminuirán bajo las 135.000 libras al año, aún un importante sueldo para el país. Los sueldos de los ministros se congelarán por los cinco años de gestión del Parlamento, una medida que ahorraría tres millones de libras, una cifra mínima si se compara con un déficit que se estima alcanzaría los 163.000 millones de libras en el 2010. Sin embargo, podría ser una señal positiva para los mercados, que están buscando indicios de que la coalición actuará con celeridad para reducir el déficit mediante recortes en los gastos públicos.

Los anuncios de severos ajustes fiscales en España y Portugal, sumados a los que se discuten para otros países de la zona del euro, se unían con los desalentadores datos del mercado de trabajo en los Estados Unidos para marcar una jornada sin una tendencia clara en los mercados, pero con mayoría de bajas. El anuncio del ajuste fue bien recibido en los mercados españoles, pero con el rechazo de los trabajadores (anunciaron un paro general) y las persistentes dudas sobre la capacidad de recuperación de la economía ibérica empujaron a las bajas en la Bolsa. En los demás índices europeos predominaron las bajas. Wall Street, afectada por datos de creación de puestos de trabajo menos favorables a los esperados, abrió en baja y mostraba una tendencia oscilante. En Asia, la mayoría de los mercados mostraron una tendencia alcista.

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